Como visión y misión nos proponemos aunar la arquitectura con los desarrollos que a veces se plantean como en aparente tensión. A priori podrían no coincidir o tensionar un poco. Nosotros creemos que no, que la sinergia, el encuentro, el conjugar la buena arquitectura con los buenos negocios y con el impacto positivo en la ciudad, es un poco lo que buscamos. Y a su vez, conjugar eso con el profesionalismo, con el servicio y la orientación al cliente, haciendo un énfasis muy fuerte en la gestión de la calidad. Todo esto cruzado y atravesado por una fuerte reflexión de lo que la arquitectura y el desarrollo generan como impacto positivo en las personas, en la ciudad y en el ambiente.
Las personas no son standard, tienen necesidades que van cambiando como sociedad, de forma colectiva e individualmente. Una persona que invierte en pozo va a transitar años por delante con su desarrollista porque los proyectos tienen una duración media de 7, 8 años. Unos 2 años demanda la compra del terreno hasta que empieza la obra, desde que uno lo conforma, aprueba los planos, hace los proyectos y demás. A esto se suman 3 años de obra y 3 años más de posventa. Por lo tanto, se debe considerar que va a haber una relación que excede lo comercial durante esos años y se plantea una experiencia de vida con el usuario. La puesta en marcha, el acompañamiento al edificio y a los usuarios en esos primeros años es parte del proceso que tenemos planificado para cuidar la experiencia del cliente.
Hace ya un tiempo empezamos a explorar con las tipologías dentro de nuestros proyectos, en particular con nuestra línea SENS que tienen lo que denominamos casas en altura, siempre con una búsqueda arquitectónica innovadora, de vanguardia, de calidad, con mucha experimentación con el material, con el lenguaje, con la espacialidad y con las expansiones.
En todo momento hay que tratar de no perder de vista cuáles son las ideas detrás de cualquier trabajo y el impacto que generan los proyectos como desarrollistas arquitectos en la escala que nos toque. Nuestro proyecto trata de hacerse cargo, de ser amable con el entorno y ayudar a que esta área se consolide con una densidad media y con nuevos espacios verdes. Lo que busca es las bondades de una casa, un verde y el cielo, pero con una vida urbana. Eso es a lo que apostamos. Y en ese sentido, también darle a la ciudad, que a veces uno siente que se pierde, porque todavía tiene situaciones urbanas muy agradables que hay que valorizar.